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Maputo
10-11 de noviembre de 2000


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CONSEJO DE MAPUTO - Trazando un Camino para Africa

10-11 de noviembre de 2000

TRAZANDO UN CAMINO PARA AFRICA - EL ESPIRITU DE MAPUTO

 

El Consejo de la Internacional Socialista reunido en Maputo los días 10 y 11 de noviembre de 2000, bajo el tema principal "Trazando un camino para Africa: un compromiso mundial para el desarrollo, la paz y la democracia", declara en lo que se refiere al futuro del continente, su total rechazo al afropesimismo, a pesar de estar consciente de que aún queda mucho por hacer para que sus esperanzas y las de Africa se cumplan.

La Internacional Socialista rechaza caer en el afropesimismo por las siguientes razones:

    • el pueblo africano permanence decidido a mejorar sus vidas y las de sus hijos y generaciones futuras, a pesar de enfrentar enormes dificultades. La creatividad, tenacidad y cooperación demostradas por el pueblo en su vida cotidiana - por ejemplo, por las mujeres que son la fuerza motriz de las economías informales en la región, o por la forma en que el pueblo de Mozambique ha perseverado en la construcción de su país luego de las desvastadoras inundaciones que lo azotaron - demuestran que aún en las peores condiciones los habitantes de este continente se encuentran entre los más dinámicos e ingeniosos del mundo;
    • la propia Internacional Socialista se vuelve más fuerte e inspirada cuando los desafíos que enfrenta son más difíciles. No vacilamos durante los tiempos más duros del apartheid en Sudáfrica, permanecimos resueltos a través de la lucha por la democracia en Europa Oriental y hoy, a pesar de los desarrollos adversos en el Oriente Medio, hemos incrementado nuestros esfuerzos para alcanzar la paz, y
    • vemos con claridad y reconocemos plenamente los enormes desafíos que Africa enfrenta, un requisito indispensable para poder responder eficientemente, y porque, en tanto movimiento global enraizado en cada región del mundo y cubriendo un horizonte de Norte a Sur, estamos en situación de ayudar en el avance hacia un mejor futuro para Africa. Más aún, Africa no pide conmiseración sino solidaridad, que es el verdadero pilar de la socialdemocracia.

En cuanto continente, Africa ha sido la menos beneficiada con la globalización, y ha sido la que ha sufrido las injusticias de este proceso, y en un mundo cada vez más desigual es la que más sufre, especialmente en términos de una escalada de la pobreza, una propagación de enfermedades devastadoras como el SIDA, la pérdida de recursos humanos a través de la llamada fuga de talentos, y el impacto negativo del peso de la deuda externa. Todos estos elementos contribuyen a la perpetuación de la violencia política y de los conflictos étnicos, los que a su vez bloquean aún más el progreso económico y social.

Para revertir esta tendencia negativa, se necesita un compromiso mundial precedido por esfuerzos sostenibles a escala local, nacional y regional, en favor de la democracia, la paz y el desarrollo en Africa. Estos objetivos deben perseguirse simultáneamente, porque la preservación de cada uno depende de la existencia y sostenibilidad de los otros dos. El compromiso para alcanzar estos objetivos, no solamente en Africa sino en todo el mundo, es lo que nos une en nuestra Internacional y es la razón por la que cada día más gente comparte nuestros valores.

 

Nuestro compromiso con la democracia en Africa

La Internacional Socialista apoya elecciones libres y justas y se reconforta al observar el entusiasmo con que el pueblo de la región acude a votar cuando tienen la oportunidad, pero en demasiados países ese derecho continúa siendo denegado. La IS también ve con aliento la determinación con que la gente defiende su derecho a voto, aún confrontando una violenta represión. En este sentido, nota con gran satisfacción la reciente victoria en las elecciones presidenciales en Côte d’Ivoire del compañero Laurent Gbagbo, Presidente del Frente Popular de Côte d’Ivoire, FPI.

La Internacional Socialista, frente a la continuación de los fraudes electorales en ciertos países y las prácticas autoritarias en otros, hace un llamamiento a sus partidos miembros, especialmente a aquéllos que se encuentran en gobierno, como también a otras fuerzas democráticas en el mundo, a actuar con mayor urgencia y firmeza cuando los derechos democráticos son denegados. Y apoya todos los esfuerzos encaminados hacia un cambio democrático en orden en Zimbabwe frente a la violencia e intimidación política incentivada por el gobierno.

La IS condena asimismo la parodia del proceso a que fue sometido Alpha Condé, de la Asamblea del Pueblo de Guinea (RPG), y demanda su libertad. Condena también la decisión del gobierno de Mauritania de disolver la Unión de Fuerzas Democráticas (UFD) y demanda que los derechos de este partido sean restablecidos.

Las existentes amenazas a la democracia requieren de una vigilancia cuidadosa, no solamente de la votación, sino también de las campañas electorales, el proceso de recuento de votos y otros elementos esenciales del proceso electoral, incluyendo la existencia de autoridades electorales neutrales e independientes que lo dirijan. Cuando sea posible, la Internacional Socialista organizará más misiones de observación de elecciones en Africa, ya que tales iniciativas han probado ser efectivas en apoyar el proceso democrático, la participación total y en igualdad de todos los ciudadanos, incluyendo a mujeres y jóvenes, igual acceso a los medios de comunicación y la práctica de la democracia dentro de los partidos políticos.

Hace un llamamiento a la IS a ofrecer apoyo y asistencia técnica a los partidos miembros en Africa para trabajar con ellos en el desarrollo de sus estructuras de partido, dentro del contexto de la consolidación de sus instituciones democráticas.

El compromiso de la IS con la democracia también incluye:

    • el apoyo al Estado de Derecho justo y transparente ante el cual los gobiernos y ciudadanos tienen una misma responsabilidad. La democracia no solamente significa elegir libremente a los gobernantes, sino también asegurar una buena gobernabilidad, transparencia, respeto a los derechos humanos y seguridad para todos los ciudadanos una vez que los elegidos toman posesión de sus cargos;
    • una mayor vigilancia y renovados esfuerzos de nuestros partidos miembros, a través de los medios de comunicación y cualquier otro canal disponible, para asegurar que la corrupción, las violaciones a los derechos humanos y otros actos ilegales sean denunciados y sometidos a sanción internacional, tanto por parte de gobiernos como de organismos regionales e internacionales competentes, y
    • una fe inquebrantable en la universalidad de la democracia, rechazando la idea de que deberían existir distintas formas de democracia, específicas a una región en particular en el mundo, que no se base o no cumpla plenamente con los principios democráticos universales, por ejemplo, la aceptación de la alternancia del poder a través de campañas electorales libres, justas y con igualdad.

 

Nuestro compromiso con la paz en Africa

La Internacional Socialista está firmemente convencida de que el apoyo y aceptación del diálogo es fundamental para la solución de cualquier forma de conflicto violento. Más aún, reconoce que es a menudo extremadamente difícil juntar a las partes en conflicto a fin de iniciar un diálogo, siendo también difícil mantener la confianza necesaria para sostenerlo.

Por lo tanto, hace un llamamiento a un mayor diálogo y renovados esfuerzos por parte de los organismos internacionales - tanto a escala regional como global, y particularmente a las Naciones Unidas - en aquellos conflictos que han demostrado ser difíciles de resolver. La Internacional Socialista incrementará sus esfuerzos y coordinará las acciones de sus miembros y de otras fuerzas democráticas para asegurar que el impulso hacia la paz en las diferentes áreas en conflicto sea mantenido.

Con respecto a la situación en la República Democrática del Congo:

    • la Internacional Socialista reitera su decidido y urgente llamamiento al pleno cumplimiento de los Acuerdos de Lusaka, que contemplan la realización de conversaciones entre los congoleses, la puesta en vigencia de un cese al fuego, el retiro de las fuerzas extranjeras, el despliegue de una fuerza militar de la ONU, una nueva constitución y la celebración de elecciones, y
    • la Internacional Socialista cree que es necesario prestar mayor atención a las fuerzas políticas y sociales que se esfuerzan por la paz y la democracia en este país.

Con respecto a Sierra Leona:

    • saluda el acuerdo firmado recientemente en Abuja, para poner fin al conflicto en Sierra Leona y apoyar al gobierno democráticamente elegido.

Con respecto a Angola:

    • la Internacional Socialista hace un llamamiento al Comité de Sanciones de la ONU a desplegar mayores esfuerzos para asegurar el cumplimiento de las Resoluciones de Naciones Unidas sobre Angola, y la sanción de toda violación.

Con respecto a Mauricio:

    • la Internacional Socialista apoya los esfuerzos del gobierno de ese país para la inmediata devolución del Archipiélago de Chagos a Mauricio.

Con respecto a Comoros:

    • la Internacional Socialista apoya todos los esfuerzos tendientes a la solución de la crisis en este país.

Con respecto a las Naciones Unidas:

    • La Internacional Socialista propugna la reforma de la organización de manera de hacerla más democrática, darle más autoridad para intervenir y hacerla más eficiente a través de la creación de una fuerza permanente y multinacional de mantenimiento de la paz.

    • La Internacional Socialista afirma también la importancia de una mayor integración africana regional y subregional al enfrentar la solución de los conflictos. Respuestas más tempranas y efectivas a los problemas a escala regional y subregional podrían ayudar a impedir que los conflictos se propaguen. Por lo tanto, aboga por mayores y más sostenibles esfuerzos entre sus miembros para reforzar las instituciones regionales en el continente, como también su interacción con organismos regionales en otras partes, de manera que la intervención inicial en las zonas de conflicto pueda desarrollarse en una forma más concertada.

 

Nuestro compromiso con el desarrollo económico de Africa

La Internacional Socialista apoya la integración de Africa a la economía global, a través de medidas justas, equitativas y efectivas y que aumenten las oportunidades en beneficio de todos los africanos.

Esto pasa por una diversificación de las economías del continente africano, que no pueden continuar como meras proveedoras de materias primas, arriesgando la continuación de su marginalización en la economía global.

Por lo tanto, la Internacional Socialista hace un llamamiento para un mayor reconocimiento y una respuesta más substancial a la situación en Africa. Dos de nuestras cuatro campañas recientemente iniciadas, están concretamente relacionadas con este esfuerzo. En primer lugar, nos esforzamos por hacer de la lucha contra la pobreza en Africa una urgente prioridad.

Esto se está haciendo de distintas maneras:

    por nuestros partidos miembros individualmente o en el marco de la cooperación;
    • utilizando al máximo los medios de comunicación y otros canales para influenciar a los organismos internacionales;
    • coordinando la campaña con organizaciones no gubernamentales en Africa y en el mundo, y
    • haciendo resaltar los esfuerzos desplegados por los gobiernos y los pueblos para aliviar la pobreza.

Debería hacerse todo lo posible para evitar la nueva forma de exclusión surgida de los riesgos que implica la brecha provocada por las nuevas tecnologías digitales, promoviendo especialmente una considerable inversión en la gente.

La Internacional Socialista ha iniciado una segunda campaña relacionada directamente con Africa, que pide la condonación de la deuda de los países más pobres, asegurándoles un acceso al mercado sin restricciones. En Africa, la deuda representa casi el 60 por ciento del producto nacional bruto y evidentemente no puede ser pagada, al mismo tiempo que su pago está causando cada año más sufrimiento.

La Internacional Socialista afirma que poner fin al peso de la deuda en Africa liberaría fondos para financiar servicios sociales básicos, especialmente en educación y salud. Estos fondos servirían como inversiones directas en recursos humanos, facilitando las bases para permitir a los africanos desarrollar su potencial y contribuir plenamente al desarrollo del continente. En consecuencia, la Internacional hace un llamamiento a poner fin a las políticas proteccionistas en los países desarrollados que han dificultado también la integración de Africa en la economía mundial. La condicionalidad en los programas de reforma estructural debería tomar en cuenta las condiciones económicas y sociales de cada país y no meramente las consideraciones de orden financiero.

La Internacional Socialista reconoce que, con respecto a la salud, aún el aliviamiento de la deuda no será suficiente para responder de manera adecuada a la propagación de enfermedades mortales, especialmente el SIDA, que cobra actualmente cada vez mayores víctimas entre mujeres y niños. Las drogas para disminuir el impacto del SIDA existen, pero no están disponibles sino a un costo más allá del alcance de la mayoría de los africanos y de Africa, creando una situación descrita con el término de apartheid farmacéutico, una situación que necesita ser resuelta a través de un diálogo constructivo que incluya la discusión de los derechos de propiedad intelectual.

Finalmente, la Internacional Socialista hace un llamamiento en favor de un mundo mejor estructurado, con una economía global que aumente las perspectivas para los africanos y para todos los ciudadanos del mundo, en el cual el desarrollo pueda ser concebido por la gente y para la gente, más que simplemente por los mercados en nombre del capital. Existe la necesidad de un consenso social global que asegure un status de prioridad a grupos específicos vulnerables al riesgo - en particular mujeres, niños y personas de edad - como también regiones amenazadas como el Africa. Este es un desafío enorme y de largo plazo, pero la Internacional Socialista es una familia y siempre cuando un miembro de nuestra familia sufre, nos congregamos en solidaridad para aliviar su sufrimiento.